Toda la oposición pedía a
Diosdado Cabellos que tomara el poder, tratando de engañar al pueblo, interpretando la constitución como siempre lo hacen, según sus conveniencias.
Se realizaron las elecciones de
Ley y hubo mucha confusión en las filas del chavismo. La muerte del líder, del
Presidente Hugo Chávez causó mucha consternación y tristeza en el pueblo y una
buena parte del Chávismo pensó que todo estaba llegando a su final, la revolución
llegaba a su final con la muerte del Presidente Hugo Chávez.
La oposición, apoyada en una
campaña electoral de las más sucias que se hayan podido ver, alcanzó una
votación muy importante, cosa que no supieron manejar, pues sus ansias de poder
y la nueva derrota, los cegó y cometieron errores garrafales, los cuales
causaron 14 muertos en esos días incluyendo la muerte de dos niños inocentes.
La oposición quiso provocar una
guerra civil. Salieron unos cuentos “locos” a matar gente, a matar venezolanos.
Gracias a Dios, el pueblo se contuvo. La llamada del gobierno fue a mantener la
calma, a esperar que la justicia hiciera su trabajo para encontrar a los
culpables materiales e intelectuales de esos crímenes.
El pueblo, con su dolor por haber
perdido a su líder Hugo Chavez, fue paciente. Y nuevamente aguantó la
arremetida de esta oposición que no da pie con bola. Todos quieren ser
presidentes. María Machado, Capriles, Leopoldo López, Ledezma, Julio Borges, etc.
etc. Todos, todos quieren ser presidentes. Pero ninguno de ellos tiene chance.
Son un montón de “borrachos” PELEÁNDOSE UN TRAGO. Ninguno tiene condiciones ni
seguidores suficientes para ganar unas elecciones. Ya han perdido 18
elecciones. Aquí podríamos recordar el proverbio que dice: “para muestra, un
botón” o mejor el otro que dice: “el que tenga ojos, que vea”.
Luego, después de unos meses,
volvieron a cambiar el rumbo de su campaña anti Chávez:
:”Vamos a las elecciones
de gobernadores y alcaldes, aquí sí es verdad que le vamos a dar con todo al
chavismo”.
Quisieron hacer de esas elecciones un plebiscito. Engañando al pueblo nuevamente (al suyo)
iniciaron una campaña feroz diciendo que en esas elecciones iban a demostrarle
al mundo que ellos eran mayoría.
¡Y QUE
PALIZA RECIBIERON!
Se gastó en su campaña cualquier
cantidad de millones de dólares. Y volvieron a perder. Mi hermano “no hay peor
ciego que el que no quiere ver”. No les quedó chance ni para decir FRAUDE (otra
vez).
Comenzando el año 2014, Yo
personalmente pensé que este año las cosas iban a mejorar considerablemente,
superando los logros alcanzados hasta el
momento. Pensé que esa derrota tan humillante les iba a dar a la
oposición una tarea muy grande, la cual consistía en revisar profundamente los
resultados de su desastrosa conducta. De revisar y de revisarse cada uno de
ellos, el porqué de tan estrepitoso fracaso. Pero ya nos hemos dado cuenta de
que eso no les importa para nada a ninguno de ellos. Lo único que les importa
es alcanzar el poder sea como sea. Y no tardaron absolutamente nada para
lanzarse con el loco plan llamado “la salida”. Esa gente no quiere a Venezuela,
a esa gente no le importa para nada el pueblo venezolano. A ellos, simplemente
les importa el dinero, únicamente el dinero, pues estaban acostumbrados a tener
dinero sin hacer nada, gracias a la mal recordada “sociedad de cómplices” que
existía en Venezuela.
Otra vez vinieron con la
intención de provocar una guerra civil en nuestro País. Además de la guerra
económica tan monstruosa que han lanzado contra Venezuela, también una guerra
psicológica, para tratar de desesperar al pueblo chavista, cosa que no
han logrado como ellos lo han planificado. Eso sí, tienen a la clase
“media” loca, con la escases de alimentos, con los precios altos, con el
acaparamiento de alimentos y otros productos y con esa guerra psicológica.
Y el pueblo resiste y resiste.
Y sigo rogando día a día porque
este pueblo sepa mantener la calma.
No quiero ni pensar que sucedería
si este pueblo tan noble se cansa de tanta maldad por parte de esta oposición.
No quiero ni imaginarlo.
